Se dice que en nuestra localidad, en tiempos de la revolución llegaron las tropas de Venustiano Carranza, mejor conocidos como los Carrancistas.
Saquearon al pueblo, atacaron a los habitantes y se llevaron a nuestras mujeres. La parroquia del pueblo no fue la excepción. Cuenta la leyenda que una mujer montada en caballo con sus compinches entró al sagrado lugar, tomando los objetos de valor que estaban a la mano, pero eso no fue todo. Cometieron la peor de las burlas a nuestro santo patrono, le colocaron un par de carrilleras y desfrutando de su motín salieron sin imaginar que la muerte los esperaba, pues los mataron a sangre fría. En realidad nunca se supo quien los mato , algunos comentan que fue algún creyente burlado, una víctima de sus atropellos en busca de venganza o justicia divina. Nada se supo, pero de lo que estamos seguros es que de dios nadie se burla.
Vía: Wikipedia.com